Primera impresión: actitud urbana con carácter deportivo
El BMW X2 se presenta como un SUV compacto que prioriza la silueta y la presencia antes que la altura pura, con un perfil coupé que busca diferenciarse de los X1 más convencionales. La parrilla y los trazos angulosos le dan una imagen dinámica que encaja bien en la ciudad y en la foto de Instagram, aunque penaliza algo la visibilidad trasera. La gama incluye variantes diésel MHEV, gasolina MHEV y la deportiva M35i, tanto en tracción delantera como total, todas con transmisión automática y potencias desde alrededor de 150 hasta 300 CV. En vivo resulta más llamativo que práctico: atrae miradas sin renunciar por completo a funcionalidad.