Diseño: belleza sin artificio
El Mazda MX-5 mantiene la silueta clásica del roadster con un capó largo, voladizos cortos y una postura baja que sigue siendo evocadora décadas después de su nacimiento. Sus dimensiones compactas (3.915 mm de largo y 1.225 mm de alto) le dan presencia en ciudad sin parecer exagerado en carretera. El conjunto busca elegancia y deportividad sin elementos estridentes, una estética que funciona tanto en un puerto costero como en el parking del supermercado.