Presencia que no pasa desapercibida
El Interstar tiene la estampa robusta que exige un vehículo de trabajo: frontal inspirado en la familia Nissan, líneas sencillas y proporciones pensadas para cargar sin florituras. Está disponible en longitudes y alturas que van desde el compacto L2H2 hasta el generoso L3H3, con largos cercanos a 5,7 m y 6,3 m según la versión; eso marca la diferencia en presencia y capacidad. El diseño prioriza la funcionalidad sobre el glamour, pero la estética utilitaria funciona: transmite solidez en obra y confianza en carretera.