Primera impresión: personalidad sobre ruedas
A primera vista el Kia Niro transmite una actitud práctica y amigable que invita a usarlo a diario, mientras que el Mazda CX-30 busca impresionar con líneas más expresivas y un aire más premium. El Niro se siente pensado para la funcionalidad sin estridencias, el CX-30 para el placer visual y una presencia más emocional. Esa diferencia de carácter marca el tono de cada viaje desde el primer momento.